Ediciones Octaedro
1ª edición: octubre de 2011
171 páginas
Sinopsis:
Esta obra nos invita a elegir voluntariamente un modo de vida sencillo. La actual recesión económica nos obliga a realizar sustanciales economías, pero ¿por qué no, en vez de padecer esta coyuntura, optamos por elegir deliberadamente un nuevo concepto de vida, el de la simplicidad voluntaria?
Se trata de un nuevo arte de vivir que privilegia el ser al estar, el ser al parecer y la frugalidad al despilfarro. Al desoír las sirenas del consumo excesivo, todos podemos acceder de manera natural a una mayor libertad, a una mayor felicidad y armonía y a una real conciencia ecológica en la vida diaria.
Los decrecentistas que han adoptado la vía de la frugalidad encontrarán aquí una guía decididamente práctica. Philipe Lahille aborda en esta obra temas tan variados como el hiperconsumo, la publicidad, los intercambio, la ayuda mutua, el dinero, los medios de comunicación, la cultura, la ecología, las vacaciones, la vivienda, la familia o la salud, y propone más de 130 consejos prácticos que podrán cambiar radicalmente nuestras vidas y darles más sentido.
Primero de todo, hay que reconocer que el autor hace trampas. No son más de 130 consejos, son más de 130 "opciones" para reducir el consumo y vivir de forma más simple y mientras algunas son totalmente distintas entre sí, otras se pueden agrupar en una misma categoría, pero los cuenta por separado. Un ejemplo: en el apartado de consumo propone, como "consejo" nº5, probar una semana sin algo y pasa a enumerar las posibles ideas: 6 carne, 7 teléfono, 8 cigarrillos, 9 alcohol, 10 restaurantes, 11 radio, 12 televisión, 13 limpieza, 14 hijos, 15 pareja, 16 (a rellenar), 17 (a rellenar). Eso no son consejos, son opciones para el consejo 5, por lo que de un plumazo se ha sacado 12 puntos de golpe.
Así pues, las categorías sobre las que nos dará ideas para minimizar el gasto, el impacto medioambiental y mejorar el bienestar son: el consumo, el turismo y las vacaciones, la cultura y el ocio, la familia y los amigos, la vivienda, el jardín, la cocina y la alimentación, la salud, los desplazamientos , el dinero, el trabajo y la muerte.
En general, hay ideas que me han gustado y me gustaría aprender a aplicarlas. Hay otras que no se me aplican y otras que no comparto, por diferencia de opiniones (argumenta el porqué propone lo que propone y algunas no coincido con lo que piensa) y hay otras que considero que en la sociedad en la que vivimos no se pueden aplicar por falta de educación. La sociedad española es muy egoísta y muy de pillaje y creo que le falta empatía y valores como para aplicar según qué cosas, a no ser que se sea una comunidad pequeña y, por supuesto, bien avenida. Es muy posible que me equivoque, pero lo digo desde mi experiencia personal y lo que veo en el día a día.
Desde el desconocimiento sobre lo que implica el decrecentismo (porque no he ahondado más) y teniendo como única referencia este libro, considero que es una filosofía de vida que me gusta y que, de alguna manera, ya practico, pues no soy consumista, reciclo y valoro las cosas por su funcionalidad y utilidad más que por su belleza o modas, entre otras cosas. Es interesante al menos echarle un ojo y reflexionar.
Como creo que ya te comenté en otra ocasión, 130 pasos me parecen muchos pasos para un libro que aboga por la simplicidad😅... aunque veo que en realidad son muchos menos. De algún modo me lo esperaba. Los libros de autoayuda que he tenido ocasión de leer solo eran un poco de contenido útil con un montón de relleno para hinchar el numero de páginas, y el precio.
ResponderEliminarY lo que me reí 😂
EliminarSí, son unos cuantos menos, pero da bastantes ideas y todo explicado muy sencillo, se lee rápido y es ameno.