23/05/2020

La casa de los 99 espíritus de Wolfgang Ecke


Ediciones Altea. Colección Altea Junio Enigmas
1984
144 páginas

Sinopsis:
El grupo de turistas desembarcó en la pequeña isla de Benmore, en las Hébridas, para visitar un famoso nido de piratas que existía allí en el siglo XVII. El punto más importante de la isla era la llamada casa de los 99 espíritus. Se aseguraba que en aquel caserón fueron abandonados, sin víveres, 99 piratas, que murieron de hambre. Sus espíritus aún moraban en el edificio y perseguían implacablemente a cualquier persona que se atrevía a entrar.
Veinte misteriosos relatos policíacos en los que el autor plantea diversas incógnitas, según un grado diferente de dificultad, para que los lectores disfruten y pongan a prueba sus dotes detectivescas.

Como menciona al final, es una recopilación de relatos, siendo el primero de ellos el que da título y aparece en la sinopsis.
Son de los que me gustan, de los que tienes que descubrir tú el resultado. Te plantean todo el caso y tú tienes que responder a una pregunta final (tipo ¿quién robó las joyas?, o ¿qué error cometió?) y buscar en la misma redacción o en una ilustración que acompaña al texto el detalle que te haga descubrir el misterio.
En general están bien los casos, de diferentes dificultades (algunos no los he resuelto), pero hay un par que están mal por lo que hace imposible resolverlos.
Uno, el fallo está en que la ilustración que lo acompaña no "coincide" con la resolución del caso. O eso, o es un problema de traducción.
El otro, sí o sí es un problema de traducción o, mejor dicho, de adaptación, ya que la premisa se basa en algo típico de Alemania (lugar de nacimiento del autor y, por tanto, ambientación de la mayoría de las historias). Sin ese conocimiento, no es posible deducir nada. En este caso, creo que se debería haber adaptado el texto y extrapolarlo a su símil en España, para mantener la lógica.
Tengo que reconocer que estos dos casos me hicieron decepcionar mucho y me planteé dejar el libro (encima son de los que aparecen al poco de empezarlo), pero al seguir leyendo y ver que la mayoría era capaz de resolverlos, hace levantar el ánimo, aunque se valga del mismo "gancho" para resolver el caso en algunos.
Al ser casos individuales, se puede ir leyendo de a poco, por lo que es una buena opción para ratitos muertos o para distraerse un poco.

1 comentario:

  1. Me gustan mucho este tipo de libros interactivos, pero a veces te encuentras en ellos fallos como los que comentas. A veces falla el ilustrador, otras el traductor, y en ocasiones lo que el autor contempla como algo lógico no tiene sentido para el lector.
    Tengo uno en el que la solución a un caso pasa por averiguar que una persona encontrada inconsciente estaba en realidad fingiendo estar inconsciente. Y eso había que deducirlo porque estaba tirada en el suelo con una rodilla doblada, y según el autor, es imposible que alguien inconsciente de verdad tenga las rodillas dobladas. Pocos atropellos y accidentes laborales a visto este hombre…
    Pero a pesar de los posibles fallos o las peculiares interpretaciones del autor sobre lo que es lógico y lo que no, los considero libros muy interesantes. Para leerlos con un bloc de bolsillo y un bolígrafo al lado, para ir tomando notas como un detective… incluso si no hace falta hacerlo.

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