Plaza & Janés
Febrero 1978
331 páginas
Última palabra: retorno.
Sinopsis:
《La muerte negra》 es el feliz resultado de la colaboración entre una gran periodista y escritora (Gwyneth Cravens) y un médico, John S. Marr (internista y epidemiólogo, jefe de la Oficina de Prevención de Enfermedades de la ciudad de Nueva York). La temática es terrible: la reaparición, como plaga, del azote medieval: la peste neumónica. Estamos en los años setenta y la 《muerte negra》 ha atacado Nueva York.
Una adolescente que regresa de una excursión es abordada por un chulo en la bulliciosa estación terminal del autobús. Ella tose en su cara; después, tose en presencia del portero de su casa... y la peste, la antigua plaga, se desencadena en Manhattan. En una carrera contra reloj, un joven médico del Departamento de Sanidad se esfuerza por descubrir a todas las personas que han tenido contacto con la chica y que no saben que son portadoras de la enfermedad más infecciosa y fatal conocida por el hombre. No puede evitar que estalle la epidemia. Y el pánico. La gran ciudad se convierte en un matadero humano...
¿Os suena? Debo reconocer que me pudo el morbo y lo empecé a leer cuando empezó todo esto del coronavirus. Lo más terrorífico, la frase de la portada: "y lo más impresionante es que uno cree realmente que podría suceder". Pues bien, aquí nos encontramos, no es la peste neumónica, pero estamos en medio de una pandemia que, ¿casualidad?, afecta a los pulmones y da neumonías. La historia siempre se repite.
Éste es un libro que, parece ser, estaba en todas las casas; lo intuyo porque lo he visto más de una vez en los famosos Punt Verd de los que ya os he hablado alguna vez, y no entiendo cómo la gente se deshace de él. No es un clásico pero tampoco es un mal libro.
Asistimos a una expansión de un virus desde su inicio hasta su máxima expresión. Tendremos el punto de vista médico (súper interesante) y el político. Y dejadme deciros que no se aleja demasiado de la actualidad (sin hacer más spoilers).
Creo que es difícil de encontrar, en la biblioteca no lo he visto (en la pública), pero si tenéis oportunidad echadle un ojo y, sobre todo, no nos olvidemos de lo que estamos viviendo y aprendamos algo para en un futuro ser mejores personas.
Yo tengo otra edición de este libro, en la que aparece una rata gigante entre los edificios de Nueva York. Lo encontré en un mercadillo y lo compré con la esperanza que las ratas (gigantes o pequeñitas) tuvieran un mayor protagonismo, porque son unos animales que siempre me han parecido muy interesantes. A pesar de la decepción que me provocó la escasa presencia ratonil, la lectura me pareció muy buena. Mucho dato y tecnicismo, pero sin llegar a hacerse farragoso. Me gustó la forma en que algunas cosas que en un primer momento parecían irrelevantes (como la huelga de basureros) luego revelan haber sido determinantes (las huelgas de basureros favorecen la proliferación de ratas, y con ellas, de enfermedades). O las reacciones de la gente cuando el pánico se desata, como ese momento en que se dedican a amontonar y quemar los libros de las bibliotecas, excepto las Biblias, retomando la idea medieval de la Peste como castigo divino.
ResponderEliminarTengo que releerlo un día de estos, porque el recuerdo general que tengo es bastante vago (quizá hasta he puesto aquí alguna tontería o algo que corresponde a otro libro ^_^U).
Por otra parte, no considero que sea morbo el buscar precisamente ahora estos temas. A mi me ocurre también, el centrarme más últimamente en leer libros o ver películas sobre epidemias. Supongo que es una forma instintiva de prepararse mentalmente para lo peor.
Me suenan ambas cosas que mencionas, así que no creo que digas tonterías 🤔
EliminarLas huelgas de basureros se dan contínuamente en Nueva York, en más de un libro aparecen, así que lo raro es que no se den más casos de estos...
Supongo que será por el instinto que dices, pero también tengo a medias la película "El hoyo" 😅