Practica el pensamiento positivo de Gill Hasson

Ediciones Urano. Terapias Verdes.

1ª edición: marzo 2020

142 páginas

Sinopsis:

¿Quieres transformar tu vida? Programa en tu mente la confianza y el optimismo.

Las personas positivas se sienten más capaces y seguras de sí mismas, saben escoger la mejor opción de entre todas las que tienen delante y, si las cosas van mal, se ponen manos a la obra y buscan soluciones. Pensar en positivo nos acerca a nuestros objetivos. Por suerte para todos, la positividad no es una cualidad innata, sino un hábito que se puede cultivar.

Gill Hasson, experta en desarrollo personal y escritora superventas, nos facilita el trabajo con más de cien ejercicios, trucos y técnicas diseñados para pensar y actuar con mentalidad positiva en cualquier situación. Rompe los patrones de pensamiento negativos, adopta un lenguaje verbal y corporal empoderador, aprende palabras «mágicas» que marcarán la diferencia y programa tu cerebro para motivarte... y sostener la motivación.

Reconozco que soy una marmota bastante pesimista y por eso me llamó la atención este libro y saber también si podía llevar algo a la práctica.

Lo bueno de este libro es que los capítulos son muy cortos y están compuestos de una parte teórica donde te explican los conceptos y una parte práctica donde te ponen ejemplos para que los lleves a cabo. Los capítulos, además, están divididos en cuatro partes las cuales evolucionan, es decir, desde entender lo básico y saber reconocer los pensamientos negativos, usar un lenguaje positivo, pasar a la acción y aplicarlo además en situaciones difíciles. 

Me ha gustado mucho también que los ejemplos que pone son de cosas mundanas. Normalmente pensamos que los pensamientos negativos los tenemos en cosas muy trascendentales y es muy difícil cambiarlos, pero si realmente nos damos cuenta, hay cosas más pequeñas que también tienen que ver con esa sensación negativa que nos autoimponemos y que si las cambiamos pueden dar lugar a pensamientos positivos nuevos.

La parte mala es que no es un libro que puedas leer de principio a fin y ya. Entendedme, sí se puede, claro, pero lo mejor sería ir parando en cada uno de los capítulos para reflexionar y aplicar lo que nos indica e intentar asimilarlo para hacerlo ya de forma automática. Es decir, se necesita tiempo para cambiar. Si adquirís el libro, es una buena lectura para ir leyendo a poquitos y tenerlo a mano.

Salvando un poco las distancias, me ha recordado al libro Hábitos atómicos, que ya vimos en el blog, me ha dejado más o menos la misma sensación agradable de hacer fácil algo que nos parece muy difícil.