Plaza & Janés
Junio 1998
298 páginas
Sinopsis:
Un muchacho muere descuartizado. La madre, una vidente de Chinatown, sostiene que lo ha asesinado un vampiro. Teddy London se muestra escéptico, pero cuando aparece el cadáver de la mujer, tan atrozmente mutilada como su hijo, el investigador se ve obligado a cambiar de idea. Y su encuentro con el presunto asesino no deja lugar a dudas: es un vampiro. No sin esfuerzo, London lo elimina. Sin embargo no termina allí la pesadilla: los vampiros de todo Nueva York se movilizan para vengar la ofensa, sedientos de la sangre de London.
Con su serie de Teddy London -personaje presentado por primera vez en Enemigos de la luz, publicada en esta colección-, C. J. Henderson se ha convertido en uno de los autores más interesantes del género de misterio sobrenatural.
Leí malas críticas de este libro y a mí no me pareció tan malo. Sí que es verdad que se flipan un poco, pero oye, es ficción sobrenatural. Es la segunda parte de una trilogía (cuyos primero y tercero no he encontrado), pero que se puede leer bien sin haber leído el primero porque, aunque hacen alguna referencia al mismo, ya te haces una idea de lo que ocurrió y puedes seguir bien la historia, puesto que una no tiene nada que ver con la otra, a excepción del protagonista y sus compañeros.
No es una obra maestra, pero está entretenido para pasar el rato.
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