Blackie Books
Marzo 2019
134 páginas
Última palabra: històries. (historias).
Sinopsis:
Alguna vegada t'has ficat tant dins d'un llibre que has desaparegut?
Vivaldo Bonfim es va perdre dins dels seus llibres favorits.
Ara el seu fill Elias té dotze anys i la clau de la biblioteca de l'àtic: es ficarà en tots aquests llibres fascinants per trobar-lo.
Descobrirà l'amor, la por, el perill i la màgia de la lectura.
Una invitació a llegir clàssics vibrants, de Stevenson a Dostoievski.
Un viatge ple de girs i personatges inquietants i màgics.
Un homenatge a la lectura com la millor de les aventures.
[¿Alguna vez te has metido tanto dentro de un libro que has desaparecido?
Vivaldo Bonfim se perdió dentro de sus libros preferidos.
Ahora, su hijo Elias tiene doce años y la llave de la biblioteca del ático: se meterá en todos estos fascinantes libros para encontrarle.
Descubrirá el amor, el miedo, el peligro y la magia de la lectura.
Una invitación a leer clásicos vibrantes, de Stevenson a Dostoievski.
Un viaje lleno de giros y personajes inquietantes y mágicos.
Un homenaje a la lectura como la mejor de las aventuras.]
Un libro que habla de libros siempre llama mi atención, pero éste en particular no me ha gustado...
La historia que explica es más profunda de lo que se lee a simple vista (como si leyeras los espacios en blanco entre las líneas del texto, tal como mencionan en el libro), pero no he sentido una conexión entre ambos mundos (lo que lee Elias y su vida real) ni he sentido que fluyeran.
Elias me ha parecido mayor a los 12 años que dice que tiene y me ha parecido muy prepotente y descarado. A lo mejor es que no recuerdo cómo era yo a los 12 o cómo son los niños a esa edad hoy en día, pero no me cuadraba nada.
Era como si fueran bloques de historia que se intentan encajar a la fuerza y no acaban de entrar, por lo que queda todo irregular.
El amor que se desprende por la literatura y el lenguaje es totalmente palpable y el autor quiere transmitirte ese amor a través de su propia visión de algunos clásicos (clásicos que, llamadme rara, pero no considero aptos para un niño de doce años [seguro que hay excepciones, pero si me pongo a mí misma de ejemplo, esos libros no me llamaban la atención a mis doce años y algunos todavía no los he leído] y creo que menos para un niño de 12 años de los de ahora).
Por mi parte no lo recomendaría, aunque sea fácil de leer y corto, no me ha enganchado en ningún momento. Bastante pasable...
Yo aún no he conseguido una copia. En la biblioteca de mi ciudad no lo tienen, y me dicen que con la situación tal como está tampoco van a solicitarlo a otra porque eso son movimientos de gente no imprescindibles entre diferentes ciudades. Este domingo me toca mercadillo (y puede que sea el último en mucho tiempo). A ver si hay suerte...
ResponderEliminarVamos, igualito que aquí, que estamos 11 bibliotecas a horario completo con trabajadores doblando y el préstamo interbibliotecario funcionando a full...
EliminarNo te preocupes, sin prisa, es un juego, así que no hay presión ☺️