Envenenado en Cardington Crescent de Anne Perry

 

Plaza & Janés

1ª edición: septiembre 1998

330 páginas

Última palabra: Thomas.

Sinopsis:

Por enésima vez el crimen se apropia de los elegantes barrios londinenses y el inspector Pitt se ve obligado a intervenir. Sin embargo, en esta ocasión se trata de un asesinato particularmente doloroso para el inefable inspector y su perspicaz esposa Charlotte, ya que la víctima es nada menos que el esposo de Emily, la querida hermana de Charlotte. Pero la tragedia no acaba ahí, ya que a continuación se produce otra muerte en extrañas circunstancias...

Una dura prueba para el inspector Pitt.

Reto Retópata 2021

Tenía muchas dudas sobre leer a esta autora desde que me enteré que la susodicha junto a su mejor amiga mataron a la madre de ésta cuando tenían unos 15 años. Me daba la sensación de que la mujer se aprovechaba de su crimen para explotar su conocimiento del mal y beneficiarse con las ventas de sus libros y no quería ser partícipe de ello.

Al final, dejé de lado los prejuicios y me embarqué en la lectura de esta novela, ya que el género policíaco es mi favorito y además me encajaba perfectamente para el punto del reto Retópata de autor encarcelado, y ha sido un auténtico fiasco. 

El primer capítulo logra despertar el interés con la presentación de un caso escabroso, pero luego esto queda en segundo plano para hablar de un grupo de burgueses idiotizados y egoístas, donde se empiezan a llenar capítulos de desayunos, comidas y cenas incómodas por la mala relación de la familia y solo se habla de chismes.

El policía que debe investigar apenas aparece y no hay investigación por ningún lado más allá de unas pocas preguntas y todo se centra en las conversaciones y suposiciones de los burgueses involucrados, sobre todo de las protagonistas, Emily y Charlotte, con demasiados desmayos por parte de algunas y demasiada impasividad por parte de otros. Me sigue sorprendiendo cómo se tomaban las muertes violentas y el hecho de que haya un asesino entre ellos en esa época...

Me ha dado la sensación de que ha querido imitar el estilo de Agatha Christie, pero no hay punto de comparación. Quizá no he elegido el libro correcto, que también podría ser...