Whitman Publishing Company
1978 (?)
32 páginas
Sinopsis:
No aparece en la contraportada.
Las orejas de Dumbo crecen en desproporción, lo que le causa problemas y ser el foco de todas las burlas. Entristecido, abandona el circo, pero Red, un petirrojo, le ayudará a sacar partido de sus "defectos" y le infundirá valor y confianza en sí mismo para conseguir su sueño.
Un cuento infantil donde Dumbo, un pequeño elefante de grandes orejas, deberá aprender a quererse y a confiar en sí mismo. Es una historia bonita donde se pone énfasis en la amistad sin prejuicios y en el esfuerzo para conseguir lo que se quiere. En el cuento, el papel de la madre de Dumbo es muy secundario y aparece un búho doctor un tanto especial.
La película es bastante fiel a la historia, aunque cambia en algunos aspectos: el motivo por el que crecen las orejas, la madre está más presente en la trama, Red el petirrojo es transformado en un ratón llamado Timoteo (que también tendrá un poco más de peso) y se usa la "pluma mágica" para infundirle valor.
Y ahora viene mi pregunta: ¿¿¿En qué demonios estaba pensando Disney para incluir las escenas de la captura de la madre, la posterior visita a su celda y la borrachera de Dumbo??? ¿¿¿Crearnos un trauma??? ¡¡¡Porque lo consiguió!!! Imagino que querían darle a Dumbo un motivo para abandonar el circo y no irse sin más, pero es muy cruel. Y la borrachera es totalmente innecesaria.
Como me sucede con varias de las películas de Disney anteriores al "renacimiento" de los noventa, Dumbo solo la vi una vez, y siendo muy pequeña, de modo que solo recuerdo la alucinante escena de "Pink elephants on parade" (que además en español se llamó "Ánimas del terror", para acabar de arreglarlo). Otros momentos de la historia, como las burlas de las elefantas o la bronca que les echa Timoteo a los cuervos las recuerdo no de la película, sino de un cuento basado en la misma que también tenía de pequeña.
ResponderEliminarEl cuento en el que se inspiró la película es en la actualidad, al parecer, una auténtica rareza anhelada por todos los coleccionistas serios de Disney. Fue escrito en 1939 por Helen Aberson e ilustrado por su marido Harold Pearl, y se utilizó para el prototipo de algo que pretendía ser un nuevo formato de lectura llamado "Roll-a-Book", en que las páginas estaban efectivamente enrolladas en dos rodillos, y había que girarlos para pasarlas. Los "rollo-libros" no llegaron a despegar, y Disney compró los derechos con la intención de publicar el cuento con un formato normal. Y se hizo efectivamente una edición del cuento con unas ilustraciones que se usarían para la película.
El cuento original, en fin, es muy breve y tiene todos los elementos que luego se adaptaron: en un circo nace un elefante que es ridiculizado por sus enormes orejas, y convertido en payaso al arruinar un número que pretendía ser espectacular. Triste y avergonzado (en la película, además, es dramáticamente separado de su madre, lo que no ocurre en el cuento) encuentra a un amigo (el gorrión Red en el cuento, el ratón Timothy/ Timoteo en la película) que lo trata con afecto e intenta devolverle la confianza en sí mismo. Más tarde, con la ayuda de otros amigos (un búho sabio en el cuento, unos cuervos que cantan doo-wop en la película) descubre que gracias a sus enormes orejas puede volar, y vuelve al circo para exhibirse triunfantemente ante quienes lo humillaban y convertirse en una estrella.
La película no presenta apenas cambios respecto al libro. El más significativo es el de hacer que la madre de Dumbo responda agresivamente a quienes se burlan de él, y por ello sea encerrada y encadenada como un animal descontrolado y peligroso, lo que incrementa la soledad que sufre Dumbo, un bebé todavía. El cuento ya presenta temas como la marginación, la humillación y el acoso; la película los desarrolla con notable acierto y dureza. En la escena en que los niños se burlan de Dumbo, éste no percibe el insulto, y sonríe y agita las orejas alegremente porque ve a los niños reír y no sabe que es a su costa; cuando el director del circo hace participar a Dumbo en el número de la casa en llamas, el payaso que hace de madre y grita "¡Mi bebé!" va disfrazado de elefante, de modo que a Dumbo lo humillan convirtiendo su desgracia en una bufonada. Esos detalles, en los que sin duda no me fijé siendo niña, me resultan más significativos como adulto que la terrorífica escena de la pesadilla/ borrachera/ alucinación.
(Termina en el siguiente comentario).
De la película me han encantado sobre todo los momentos en que se muestra a los animales con sus crías, la alegría con la que todos reciben a sus bebés, la sorpresa que se llevan al encontrarlos, y cómo enseguida los acunan y los cuidan. Me ha partido el corazón la inmensa pena de la madre de Dumbo al principio, cuando cree ilusionada que la próxima cría de la cigüeña va a ser la suya, y la decepción al contemplar que es el bebé de otro animal, y su mirada cuando ya suben al vagón para continuar su viaje y aún mira al cielo esperando, esperando... La nana "Baby mine", en la que la madre y el bebé solo pueden acariciarse con la trompa, mientras los demás animales duermen acurrucados con sus crías, es estremecedora. Me gustó mucho el detalle de que Dumbo coja con su trompa la cola del pequeño Timothy cada vez que caminan juntos: es lo que haría con su madre o con otro miembro de la manada, y es lo que hace cuando solo tiene a Timothy para ocuparse de él.
ResponderEliminarLo que menos me ha gustado es sin duda el final, muy apresurado, contado a toda prisa. Dumbo descubre que puede volar, vuelve al circo, da un escarmiento a los que se burlaban de él y se convierte en una estrella, todo en los cinco últimos minutos de la película. Puede entenderse que, en aquel momento, Dumbo fue una producción corta y de poco presupuesto que solo pretendía recaudar fondos de emergencia para Bambi, y que en el estudio no pudieran o no tuvieran mucho interés en desarrollar un final sólido. Aun así, después de todos los sufrimientos del pobre elefantito me habría gustado verlo explayarse en sus nuevas habilidades, crear asombro y admiración fuera del circo, y sobre todo ir a buscar a su madre (tal vez entrando por una trampilla del techo de su vagón) sonriente y feliz.
La banda sonora no me ha llamado especialmente la atención, salvo la ya mencionada nana "Baby mine" y "When I see an elephant fly", interpretada por el coro de Hal Johnson.
Aunque no hace muchos años se habló de una segunda parte con nuevos personajes, creo que a esta película le vendría mucho mejor un "remake" con mayor metraje y presupuesto en que se desarrollaran mejor las escenas importantes sin perder la ternura, el encanto y la inocencia que caracterizan al personaje de Dumbo.
¡Muchas gracias por comentar! Como siempre, tus comentarios parecen mini tesis doctorales de literatura xD
EliminarNo sabía lo de los "roll a book", me parece muy original pero un poco delicado para un cuento infantil, a saber cuánto tiempo duraría entero...
Sí que los detalles sutiles de las burlas a Dumbo durante el desfile o la actuación son más importantes a nivel moral y, aunque, por supuesto, no las apoyo, sí que las veo necesarias para la historia, mientras que la borrachera (ya no la borrachera en sí, que también porque no es muy lógica en un bebé, sino las visiones aterradoras) y el encierro de la madre y la visita a la "cárcel" son, a mi parecer, totalmente insustanciales para la narración.
Hablando de "remake", parece ser que Tim Burton hará una versión real (no dibujos) de Dumbo. Miedo me da...
Muy buenos comentarios. Excelente. Saludos
ResponderEliminarHola!!! Estuve tratando de conseguir una copia en pdf del cuento original pero no tuve suerte! Alguien tendrá la historia real para compartirla? Tienen mi mail por si alguien la tiene. muchas gracias, Andrea
ResponderEliminar¡Bienvenida a la biblioteca!
EliminarPues este cuento lo encontramos por la red, pero no sabría decirte donde.
Miro de investigarlo y te comento algo, pero te lo tendré que dejar por aquí ya que no aparecen tus datos de contacto.